CLSK Review: Los Mejores Discos del 2013, según el staff de CLSK – Parte I

Se acaba el año y los recuentos son una tradición. En un año bastante cargado de nuevos trabajos, hace unos días comenzamos por estos lados la discusión de cuáles son los mejores discos del año 2013. En esta oportunidad igual que el año anterior, hemos dejado un grupo de álbumes que reflejan el heterogéneo gusto musical del staff de Chileanskies, por lo cual acá les dejamos, en tres partes, el listado de los mejores discos del año 2013, sin orden, de los cuales esperamos, como siempre, sus impresiones al final de cada nota. Los invitamos además a leer con calma, ya que puede llevarse varias sorpresas.

TesseracT – Altered State

Lo expusimos hace un tiempo atrás, y la placa de estos exponentes británicos del djent, se volvió rápidamente en una placa de cabecera, especialmente por la intensidad inherente del metal inteligentemente mezclada con sutiles toques armónicos, especialmente vocales y de saxofón, creando un disco dinámico y ágil, que se siente como una evolución totalmente orgánica para los matemáticos sonidos extremos que se originaron con Meshuggah.

Black Sabbath – 13

Estando en una época donde los regresos son pan de cada día, pocas veces son tan, pero tan satisfactorios. Después de una larga pausa, y todo facilitado (lo que causa sentimientos encontrados) por el fallecimiento de Ronnie James Dio, Black Sabbath renació para demostrar que fueron, son y serán, los padres del metal, entregando un disco oscuro, potente y cargado de riffs y sonidos que bien evocan los sonidos de aquellos discos lanzados por la banda en los años 70, pero con la madurez de un grupo con más de 40 años de trayectoria.

Steven Wilson – The Raven That Refused to Sing (And Other Stories)

Cuando este artista saca un disco, siempre hay mucha expectación y no es para menos; Steven Wilson, con el tiempo, se ha transformado en un referente del rock progresivo actual, y en esta oportunidad lo demuestra con un disco mágico, sencillo y bello, pero no por esto sin energía, donde las sensaciones generadas van más allá de la capacidad técnica de quienes interpretan estas piezas quienes, comandados por un artista, no abusan de sus habilidades para lograr algo casi perfecto.

Anneke van Giersbergen – Drive

Nadie puede negar que existieron dudas sobre el futuro de Anneke cuando decidió lanzar su carrera como solista. Con su 5to disco bajo el brazo, todas éstas ya se han disipado y lo que podemos escuchar en esta nueva placa es de alguna forma una continuación natural de lo mostrado con Everything Is Changing: un disco muy dinámico, con temas muy ‘oreja’, con una gran banda de apoyo pero en donde el principal instrumento sigue siendo la bella y versátil voz de la cada día más rica Anneke; el único aspecto negativo es su duración, que no alcanza a llegar a los 40 minutos.

Sound Of Contact – Dimensionaut

Uno de los mejores discos debut del rock progresivo de este último tiempo. Siguiendo la historia de un viajero interdimensional, la banda recoge lo mejor de las bandas clásicas de los 70’s y 80’s sin dejarse llevar por el virtuosismo innecesario que tanto plaga el género en estos días. Un disco conceptual siempre es una apuesta arriesgada, sobre todo si lo terminas con una suite de 20 minutos, pero el grupo sabe llevar todo a un muy buen término, por lo que recomendamos tenerlos en la mira.

Esta fue la primera parte de la selección de discos que consideramos imperdibles de este año que ya se acaba. Así que si en esta oportunidad no apareció aquella placa que tanto escuchaste, sería bueno que pongas atención en las horas siguientes, ya que todavía quedan dos notas entre las cuales tu favorito puede aparecer. Como siempre tu opinión es más que necesaria.

Nos vemos en un rato.