Hace un tiempo atrás comenzamos a saber detalles de una nueva “superbanda” llamada Nova Collective y es momento de referirnos (si, con un poco de retraso) a su primer trabajo. La agrupación nos trae un disco completamente instrumental, en el que exploran un moderno rock progresivo, mezclando elementos del Metal, el Jazz, Rock (o fusión como lo denominan) y uno que otro elemento de la música étnica (o “World Music” como le llaman), elementos que se evidencian en melodías que podríamos referir como “orientales”.
El proyecto se inicia el año 2014, cuando el bajista Dan Briggs (Between the Buried and Me, Trioscapes) y el guitarrista Richard Henshall (Haken) comienzan a intercambiar correos electrónicos, conversaciones por chat y algunos demos. Una vez que ya tenían arreglos y avances para esas versiones preliminares, convocan al baterista Matt Lynch (Trioscapes) y al tecladista Pete Jones, iniciando así este viaje musical separados por el Océano Atlántico, ya que tanto Briggs como Linch se encontraban en los Estados Unidos, mientras Henshall y Jones estaban en Inglaterra. El cuarteto pudo juntarse para grabar el material, a inicios del año 2015.
El disco contiene seis cortes en los que muestran las evidentes capacidades musicales y compositivas de cada uno de los miembros del grupo, destacando una significativa complejidad rítmica, armónica y melódica. A ratos, dejan la impresión que en algunos pasajes del disco, como en algunas secciones del primer tema y en la segunda mitad del último, utilizaron la improvisación como recurso compositivo.
“Dancing Machines”, el tema que da inicio al disco demuestra en sus primeros 60 segundos las avanzadas habilidades musicales de la banda, mostrándose como uno de los tema más intrincados del larga duración, lleno de cambios rítmicos y melódicos, además de fragmentos en los que la estructura entrega espacios para presentar solos o arreglos en solitario por cada miembro.
Por su parte, “Cascades” da respiro al caótico inicio del disco, para luego dar paso a “Air”, el que continúa la lógica de su antecesor, en el cual se nota fuertemente la influencia “oriental” a través de diversos arreglos y melodías.
“State of Flux” desde su inicio genera una sensación de tensión, dada por las variaciones rítmicas y la lógica de pregunta/respuesta entre los músicos, luego de eso progresa a otros momentos, manteniendo parte de la estructura inicial, pero con tanta variación que a ratos se vuelve un –placentero- enredo sonoro.
El quinto corte, “Ripped Apart And Reassembled” es el más breve de la placa y nos ofrece una estructura algo más estable, pero no ajena de tensión y pasajes de virtuosismo musical, anunciando así el cierre del disco con el tema que da su nombre: “The Further Side” desde su inicio atrapa al oyente, con pasajes diversos en los que la tensión y el reposo parecen tener una lucha a muerte por cual predomina mientras transcurre, volviéndose en definitiva en un gran final.
Un punto que pudiera jugar en contra de interesarle a un oyente no familiarizado con el género, tiene que ver con que varios cortes son amplios pasajes llenos de variaciones rítmicas y melódicas, en las que incluso no hay repeticiones de fragmentos anteriores, lo que genera desorientación, siendo difícil a veces identificar inicios o finales de los temas. Pero para quien está más acostumbrado a estos sonidos, este rasgo no es nuevo y constituye un recurso de uso habitual entre otras agrupaciones del estilo.
No está demás decir que el disco fue editado por Metal Blade (¡!), un sello clásicamente vinculado al metal más extremo, siendo –probablemente- Nova Collective una excepción en su catálogo habitual. Además, vale destacar el sonido conseguido a través de la mezcla y masterización, proceso que estuvo a cargo de Rich Mouser.
Nova Collective y la composición arriesgada
Para finalizar, tenemos que decir, se agradece el riesgo asumido por Nova Collective, quienes hacen un uso avanzado de la composición, interpretación, experimentación y –aparentemente- la improvisación, una banda que no escatima en el uso de los recursos referidos, sin caer en el exceso. Nos atrevemos a decir que esta propuesta es música progresiva, al servicio de la música.
