Un show de esta categoría se da pocas veces; una noche “progresiva” que, al ser conscientes de la genialidad de Crisálida, el virtuosismo de Matraz y el incomparable dinamismo de Tryo, desde temprano podíamos asegurar una velada inolvidable. Ahora vamos por parte.
MATRAZ
Con un poco de retraso, el show comenzó a las 20.45 hrs. Parte sonando la potente entrada de “Gritaré” como introducción grabada, mientras la banda sube al escenario tomando los instrumentos y con gran energía dan inicio a este Andes Prog II. El tema se desarrolla de manera perfecta, con mucha elegancia, haciendo vibrar al público, el cual manifiesta su emoción de manera estridente, dando paso ya a la sólida parte instrumental del tema.
Sin lugar a dudas Matraz, a pesar de 9 años en laureles, demuestran una vigencia incomparable, sin embargo, hay que señalar que la puesta en escena de la vocalista Loreto Chaparro dejó un poco que desear en lo que respecta a integrar al público y hacer que la audiencia se sienta parte del espectáculo, no se logró conectar con el público. Salvo ese detalle, es destacable su nivel de profesionalismo y su registro vocal.
Continua la noche con “Puntual como puñal”, que trae desplante y fuerza desde su inicio, gracias a la entrega concisa de la banda y a un despliegue instrumental ejemplar. Lamentablemente hubo fallas en el área de sonido que, en varias oportunidades, no dejó apreciar la guitarra y la voz no tenía la presencia necesaria, haciendo que la audiencia no entendiera muy bien la letra y/o parte de la melodía, error sin duda reprochable que volvió a repetirse más avanzado el festival.
Seguimos con la imponente “Rendición”; increíbles secciones instrumentales que logran un nivel de misterio y progresividad compenetrado al más y notable estilo de Matraz.
Una gran introducción de piano da paso al siguiente tema “Sangre Derramada” en el cual se destaca el despliegue vocal en su inicio y el ritmo en batería al más estilo latinoamericano, olvidando, al menos por este momento, los problemas de audio presentados anteriormente.
Así se llegó al clímax de este espectáculo, que para muchos de los que estuvieron allí sin duda fue un momento memorable y nos dejó a la gran mayoría sin palabras. Todo comenzó con calma, formando una atmósfera destacable y poco a poco la batería hizo más intensa su presencia. Se va notando un crescendo deducible y notable, donde Claudio Cordero con un solo de guitarra fue el encargado de desembarcar todo en una intensidad sostenida, siempre al pulso ordenado de la batería que le va otorgando la potencia que estructura el ambiente generado por la banda.
La batería, espina dorsal de este cuerpo llamado Matraz, a cargo de Marcelo Stuardo, se desempeño de forma impecable, dejando nada de lado en su área, con gran desplante y fuerza. Por su parte, Diego Aburto, a cargo de los teclados, puso la atmósfera a esta mágica noche. La solidez de Jorge García en el bajo hizo resonar aquellas notas profundas y versátiles en nuestros pechos, mientras que Loreto Chaparro, con su voz, desbordó carisma para el deleite de los asistentes. Por último, pero no menos importante, Claudio Cordero se mantuvo sólido y expectante, dando muestra de su virtuosismo y genialidad, lo que se convirtió en la antesala de “Amanetech”, llevando a los asistentes hacia la oscuridad y al misterio con una estructura melódica más accesible que lo anterior, mientras todo se va a rojo en el escenario.
Aunque acercándonos al final nuevamente se presentan problemas técnicos de audio, dejando a la guitarra y al teclado a ratos sin volumen, finalmente la banda se despide luego de un gran setlist y baja del escenario con gran orgullo, ya que a pesar de los problemas, mostraron un impresionante despliegue de talento.
CRISALIDA
A las 21:50 hrs, Crisálida entra con toda personalidad y confianza al escenario. Todo parte con una gran potencia, sonando en nuestros oídos “Cabo de Hornos”, canción de la más reciente placa de la banda. Cinthia Santibañez derrochaba carisma aun cuando el volumen de micrófono era algo bajo, y el resto de la agrupación aprovechaba de entregar mucho desplante y virtuosismo, una correcta forma de dar paso a la calma y paciencia que los caracteriza.
Todo esto dio paso a la energía de “Araucana”, en la cual destacan la voz potente y perfectamente afinada, y melodías armoniosas y dinámicas, que luego regresan a la incomparable calma nostálgica que el público merecía después de tanto virtuosismo. La banda se presenta sólida y compenetrada, cada uno sabiendo perfectamente su función, formando una impactante muralla de sonido.
Resulta anecdótico recordar la situación que le ocurrió al guitarrista en medio de “Atacama”, a quien se le soltó la guitarra, teniendo que hincarse y seguir el espectáculo desde abajo para no perder la coordinación con sus compañeros; todos entendieron que fue un error inesperado y el show continuó con algunas risas de apoyo, pero el tema culminó de manera destacable.
Continua la noche con todo el potencial y carisma de esta banda que deja boquiabiertos a los espectadores al hacer uso en “Kitral” del infaltable ritmo en 6/8 que hace que nuestros oídos recuerden la latinidad que nos representa.
Crisálida regala al público un adelanto de su nuevo disco, asegurando que posiblemente sea el primer single del álbum: “Morí aquí”, tiene una excelente vocación para primer sencillo, con precisas melodías y potencia en cuanto a musicalidad, un destacable coro, bien definido y de una estructura más bien pesada y metalera.
Luego la banda desata todo el poder del prog metal, con tintes de Deftones, en un tema extraído de su gran disco Raco (2009), sonando literalmente como una aplanadora. Así, “Vientos del Sur” se transforma en uno de los grandes momentos de la noche.
Finalmente, la banda se despide con el gran y ya reconocido “Solar”, haciendo llenar de emoción a la audiencia por su melódica estructura y emocionante progresión. Y recién eran las 22:40 hrs.
TRYO
Cuando el reloj marcaba las 23:04 hrs, Tryo realizó una introducción con un tema al mejor estilo del rock progresivo setentero: virtuosismo en el bajo, compleja batería y atmosférica guitarra, lo que dio paso a contratiempos continuados y marcados, con buena coordinación y cortes por doquier, cayendo a una melodía latinoamericana casi apocalíptica. La diversión continúa con un dinámico show, riffs activos, melodiosos y vanguardistas, con grandes variaciones rítmicas.
Las voces en armonía comienzan a sonar y detrás de ellos una punzante canción, “Vive” que llena de rabia el auditorio con un destacado deje folclórico en su interpretación que da presencia a un corte en la que nadie sabe qué puede suceder.
Comienza un instrumental ambiental que deriva notoriamente hacia un progresivo jazz fusión muy cercano al gran estilo de Yes, Camel e incluso King Crimson, todo bajo una ejecución perfecta, lo que a esta altura está de más decirlo.
Sin duda una de las bandas más destacadas de la noche a lo que refiere su virtuosismo: Tryo, con gran proyección y talento, nos muestran lo mejor de su cartilla, volviéndose muy agradable al oído, en especial para quienes disfrutan de la genialidad del rock progresivo.
Cada canción es un universo distinto, con ganas de explotar en cualquier momento. Por lo mismo, reina el silencio y expectación, dada la concentración de la audiencia ante tal derroche de talento.
El grupo presenta un adelanto de su próximo trabajo en estudio (conceptual), “Crudo”: Excelente tema, gran instrumental, donde el bajo lleva la batuta en la melodía, sin dejar de lado el increíble aporte de sus compañeros en las bases, dejando claro que en este grupo se congrega a unos de los mejores exponentes en el bajo, guitarra y batería en la escena actual. Claramente “Crudo” dará mucho que hablar.
Llegamos a “Órbitas”, un tema muy Jazz fusión, donde lo progresivo resalta en ciertas ocasiones al mejor estilo de Rush, dejando ver la notoria influencia de los canadienses en esta agrupación nacional, lo que da paso al cierre con la presentación del último tema de esta mágica noche, “Justicia”, con mucho empuje y atractivo musical. Así la banda finaliza su presentación, agradece al público su asistencia y respeto, el cual los ovaciona, para retirarse del escenario a las 00.00hrs, dejando más que claro existen sobresalientes exponentes del rock progresivo en nuestro país.
Sin duda una noche formidable, llena de talento y beneficios directos a nuestros oídos; tres bandas que han sabido posicionarse en lecho musical chileno, lo que nos deja la clara reflexión que ver bandas nacionales de calidad es lo mejor que podemos hacer si disfrutamos de la música, y que mejor si es de nuestra tierra.
Luego de esta noche, queda muy claro que en Chile existe talento compositivo, lo que se convierte en una invitación a disfrutemos más de las bandas que nos presentan y están ansiosas por demostrar que nos merecemos mejores cosas que solo bandas tributo. Y como dijo Cinthia Santibañez (Crisálida) “comencemos a exportar música y no solo importar”. Con estos exponentes, esa tarea se hace más fácil.
Setlist Matraz – Andes Prog II
- Gritaré
- Puntual Como Puñal
- Redención
- Sangre Derramada
- Súper Niño
- Amanetech (Amanecer + Robotech)
- Trazma
Setlist Crisálida – Andes Prog II
- Cabo De Hornos
- Araucana
- Atacama
- Kitral
- No quiero Morir Aquí
- Raco: Vientos del Sur
- Solar
Setlist Tryo – Andes Prog II
- Valparaíso Psicodélico
- Fanfarria
- Vive
- Crudo (La Batalla del Ego y el Alma) – tema nuevo
- Camino + Contrastes
- Estudio + Niebla
- Órbitas – tema nuevo
- Justicia
Te invitamos a que revivas esta gran noche gracias a la CLSK Galería que preparamos para ti.
Fotografías por Carolina Cañón Salinas
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