Durante la segunda mitad de 2020, el guitarrista Sebastián Lekanda (Automata, Bella & Putana) se puso en contacto con el bajista Rodrigo “Pera” Cuadra y el guitarrista Alvaro Soms (ambos miembros de Dorso), además del baterista Alfredo Smith (Automata) para dar forma al proyecto que llevaría por nombre Alhazred, cuyo primer EP ‘Cúpula’ ya habíamos revisado y ahora pasamos a diseccionar en nuestra sección CLSK Review.
En un primer acercamiento al grupo, la palabra Alhazared -originario del imaginario de Lovecraft- ya se logra percibir un halo de misterio que acompaña y circula en torno a una escueta aproximación sobre la proyección y alcance de la banda.
El ecléctico proyecto que se alimenta de y al mismo tiempo fusiona diferentes influencias que van desde el amplio catálogo que ofrece el mundo del rock, metal, progresivo, jazz, vanguardia hasta pasar por la música experimental, presenta un trabajo bastante atractivo para los buscadores de los sonidos más exigentes, vanguardistas y por qué no también decirlo, extravagantes.
Es así como nos sumergimos en los primeros acordes de “Cúpula“, tema que da el nombre al disco y quite nos anuncia una entrada ecléctica, experimental que avanza y transita a través de intrincados riff de guitarras, ritmos sincopados de jazz fusionados con quiebres de corte más progresivos, por supuesto sustentados por la oscura y demoníaca voz de Pera Cuadra. ¿Alguien imaginó alguna vez una mejor combinación qué esta?
“Altamar” se revela con unas guitarras mucho más rifferas que transmiten todo el peso que puede lograr la banda sin abandonar la veta vanguardista, dejando entrever el sonido de un bajo fretless que acompaña esta maraña de riffs que trepan por el cuello hasta llegar a los sesos. En contraste, la templada introducción de la instrumental “Cutulino” nos sumerge en un viaje de corte mucho más experimental, acompañado por voces femeninas a ratos lamentosas que dan una suerte de atmósfera mucho más oscura e inquietante.
“Modestia primitiva” fue el tema escogido como single para darse a conocer y que ya presentaba una clara muestra de lo que es el adn del disco: riff pesados, guitarras experimentales, baterías a destiempo y voces oscuras; una intrincada amalgama rítmica que fusiona lo mejor del mundo progresivo con el oscurantismo y el metal.
Cerrando el disco, “Fantástica marcha fantasmal” presenta una especie de letargo alegórico que nos invita a vincularnos a atmósferas de corte más onírico, las cuales finalmente se quiebran con el ingreso del bajo y la batería en comunión para dar cierre a este viaje vanguardista lleno de atmósferas inquietantes y mundos surrealistas.
Alhazred: un tránsito entre el vanguardismo y el oscurantismo
Resulta difícil encasillar a una banda como Alhazred que logra moverse con tanta naturalidad por un amplio espectro de estilos, pero sin embargo podemos decir lo siguiente: estamos frente a un grupo que no teme en presentar su propuesta, con músicos que llevan años de carrera en la música y que todavía se atreven a jugársela por la innovación y dejar de lado clichés que de seguro les harían atraer seguidores en masa. El rollo de Alhazred no va por ese camino.
Nos enfrentamos a un álbum creado por temas que no alcanzan los 5 minutos de duración, en donde se presenta una pieza con mucho potencial y como pocas veces hemos sido testigos en un país tan alejado del mundo como es Chile. Sin lugar a dudas altamente recomendado para los amantes de los sonidos experimentales y vanguardistas, pero está vez con un agregado sazón de oscurantismo.
Les recordamos que Alhazred está pronto a sacar su primer LP, del cual estaremos entregando información en cuanto lo tengamos en nuestras manos. Mientras tanto les dejamos la versión digital para que conozcan y puedan disfrutar de está tremenda banda, que es más de seguro, nos seguirá entregando gratas sorpresas a futuro.