Ya pasó OdraciR y Jorge, ahora es mi oportunidad de dejarles mis 3 discos favoritos del 2011. Si no han reconocido las carátulas, ahora es cuando pueden dislucidar cuales fueron, según mi humilde opinión, los mejores discos de este año que ya se termina, sin orden de preferencia.
1. Mastodon – The Hunter
No es la primera vez que los norteamericanos pasan por esta instancia y esta placa es una muestra clara del lugar que Mastodon está tomando en el mundo musical. Y ya con un total de cinco discos en el cuerpo la agrupación ha demostrado evolucionar favorablemente, aun cuando el trabajo realizado es mucho más simple que sus placas anteriores, pero no por eso de menor calidad.
Los singles “Black Tongue” (con un riff central digno de quedarse pegado en tu cabeza por días) y “Curl Of The Burl”, son los encargados de abrir esta placa y de ser una presentación potente y directa que insta a descubrir el resto del trabajo, sin duda mucho más digerible que sus álbumes previos Blood Mountain (2006) y Crack The Skye (2009).
En esta oportunidad Brent Hinds y compañía se acercan a un sonido mucho más limpio, dentro de la característica densidad de sus sonidos fuertes y pesados, tal como se aprecia en temas como “Dry Bone Valley”, que además muestran una clara orientación hacia los sonidos más clásicos, pero con la pesada dosis de elementos actuales.
Aun cuando la línea progresiva y conceptual ha sido el común denominador de sus placas anteriores, Mastodon se arriesga con The Hunter, un disco sin una columna vertebral y con un horizonte mucho más radial, pero si con una coherencia suficiente para demostrar que un álbum de “singles” no debe porqué sonar disgregado.
2. Steven Wilson – Grace for Drowning
Debo reconocer que después de escuchar Insurgentes (2008) y dada la oscuridad del disco, no tenía mucha fe sobre un nuevo trabajo solista del líder de Porcupine Tree, eso sí, sin perder las esperanzas. Pero tan sólo al escuchar el sonido más clásico, equilibrado y “crimsoniano” de esta placa, queda en evidencia que el trabajo de Steven Wilson como solista está para grandes cosas.
Tenemos claro que Wilson maneja un espectro musical muy amplio y que su capacidad para estar trabajando constantemente en nuevas composiciones no decae; incluso pareciera que cada vez aparecen más trabajos del músico inglés, y en esta oportunidad no hay espacio para la decepción.
Si bien Steven Wilson critica seguidamente que ya no se hacen discos cortos como en los 70, se da el lujo de lanzar un disco doble, dos partes llamadas “Deform To Form A Star” y “Like Dust I have Cleared From My Eye”. Manteniendo pocos elementos de la oscuridad de su placa solista anterior, el artista da paso a un trabajo progresivo que mezcla de muy buena manera la vibra experimental setentera (a modo de homenaje a la época dorada de la música según él), con los elementos electrónicos que caracterizan a los trabajos en que usualmente participa, incorporando además elementos sinfónicos y del jazz.
Joyitas como “No Part Of Me” y la necesariamente extensa (23 minutos), y más representativa del álbum, “Raider II” se roban la película, en la primera y segunda parte de la placa respectivamente, dejando espacio para que muchas emociones fluyan en quien oye las 12 pistas de este disco, entre las que además se destacan la bella “Postcard” y la densa “Track One”.
Sin duda podemos decir que Steven Wilson ha dejado la vara alta para lo que pueda presentarnos en el futuro, ya sea como solista o en Porcupine Tree.
3. Radiohead – The King Of Limbs
Si hay un grupo que puede hacer lo que se le dé la gana es Radiohead. Lo digo porque siempre habrá personajes que esperarán un nuevo OK Computer (1997), pero el resultado es un nuevo Kid A (2000); en esta situación similar, serán los mismos que critican fuertemente este trabajo, los que más adelante lo encontrarán una obra maestra subvalorada en la primera impresión.
Radiohead lleva mucho tiempo en el rubro como para saber lo que hacen y hacerlo bien. The King Of Limbs, siendo consecuentes con tu historial, retoma esa línea experimental, de sonidos más electrónicos que dejó “algo” en pausa en su anterior trabajo In Rainbows (2007), siendo “Feral”, uno de los mejores ejemplos de esto, así como “Lotus Flower”, una de las más digeribles directamente del disco (inolvidable además por el bailecito de Thom Yorke en su video). Pero siempre hay espacio para una balada minimalista y es ahí donde “Codex” y “Give Up The Ghost”, hacen un trabajo perfecto.
Incluso todos quedamos con la impresión de que un segundo disco acompañaría a este trabajo, más cuando el final de The King Of Limbs, con “Separator”, es algo abrupto, completando una duración de 37 minutos y fracción. Y si bien puede ser criticado de corto, la complejidad y el sinnúmero de elementos presentes en cada tema dan para pensar en la titánica tarea ejecutada por estos músicos ingleses, quienes ni se arrugan para tocar en vivo el complejo trabajo, agregando además los temas “The Daily Mail” y “Staircase”, como lo hablamos hace poco, las que de seguro pueden considerarse como las piezas faltantes de este rompecabezas. Es más, estas pistas “perdidas” inclinan el resultado hacia una crítica más favorable aún.
De todas maneras este disco es de aquellos que te dejan expectantes a lo que venga, sea cuando sea.
Por último, debo hacer la respectiva mención honrosa y esta vez se la llevan los chilenos (si, chilenos) de All Tomorrows, a quienes les venimos siguiendo la pista por su excelente trabajo denominado Opilion, demostrando que los sonidos pesados en Chile se están tomando la cartelera y con una calidad envidiable. De ellos ya hemos hablado acá, donde además pueden escuchar el disco completo.
Khanzo
15/12/2011 at 16:32
Deform To Form A Star es lo mejor que he escuchado en años!! El delicado la hizo este año. Los otros 2 debo escucharlos aún 😀
Asmodeo
15/12/2011 at 20:53
la mejor seleccion hasta el momento ah!!
Khanzo
16/12/2011 at 01:44
El de Radiohead de plano no me gustó, y el de Mastodon… como que deja harto que desear si lo comparas con Crack In The Sky.