Es tan delgada la brecha entre diferenciar preocuparte por algo que realmente quieres con algo que realmente amas. Si lo pones del punto de vista de la persona, versus una actividad, el común podrá pensar que siempre la persona es más importante que cualquier cosa que hagamos, pero, ¿qué pasa si no es así? ¿y si realmente lo que te apasiona no es tener a alguien a tu lado, sino que basta con lo que realmente te gusta?, quizá la diferencia pueda remitirse a la necesidad de afecto o lo que sea que se busque en alguien, pero puede que eso que amas te dé la suficiente satisfacción que necesitas o, en resumidas cuentas, todo lo que necesitas. La música es una de esas cosas que puede perfectamente llenar ese vacío de afecto.
Pensar además en diferenciar actividades, una por los logros tanto académicos como económicos que te reportará en el futuro, versus, la satisfacción de estar haciendo lo que realmente deseas a cualquier costo, puede hacer que tu mente divague una y otra vez al respecto sin llegar a una conclusión clara. La primera opción es, a vista fácil, la que mejor futuro te traerá: desarrollar una actividad laboral que remunerará lo suficiente para desenvolverte en esta sociedad hostil llena de sacrificios y altos gastos pecuniarios que deberás resolver, después de quizá haber pasado por una larga carrera que te permitirá todo aquello, sin ninguna duda al respecto.
La segunda opción, es la que muchos dejan de lado: permitirse ser feliz con lo que uno anhela para su futuro no siempre traerá consigo el bienestar estándar que la sociedad impone, lo cual se asimila directamente con la felicidad; no traerá aparejado una aceptación fácil de tu entorno o es muy posible que ellos simplemente rechacen cada proyecto que realices, por más interesante que pueda ser. A todo lo anterior se suma el complejo escenario que implica ser músico en nuestro país , debido a las infinitas puertas que se cierran frente al artista en desarrollo, dejando solo aquel espacio a los que la industria considera aptos y aceptables por asuntos netamente rentables.
Sin embargo, cabe preguntarse: ¿La comodidad estándar o la aceptación social es lo que se necesita para relacionarme con el resto y abusar de la palabra felicidad?, a mi parecer, no. Solo el estímulo que se requiere para un logro emocional favorable es atender a cuales son las necesidades reales que el ser interior necesita para estar en paz.
Es claro que alcanzar el equilibrio en cualquier tipo de circunstancias una tarea compleja, pero es lograble o, mejor dicho, medianamente posible. Para ello, se pueden tener dos opciones: vivir o al menos intentar vivir de lo que uno desea y quiere para su presente y futuro, o trabajar por ese objetivo y/o por lo que te permitirá alcanzarlo en algún momento, cuando tal vez la estabilidad económica y circunstancial lo permitan. Los dos caminos son altamente complejos y ambos con alto grado de incidencia a lo que respecta el elemento tiempo, el que lamentablemente se hace cada vez más escaso, tal como lo ilustra Roger Waters en el album Dark Side of the Moon:
The sun is the same in a relative way, but you´re older, shorter of breath and one day closer to death.
Si en los dos caminos logras una especie de equilibrio, te darás cuenta que no solo conseguirás el objetivo, sino también responder por lo que quieres y no simplemente dejarlo de lado, algo que probablemente te acarreará decepción.
La clave es organizarte; cualquiera de las dos opciones son válidas solo si procuras entregar todo por ellas, a cualquier costo, a cualquier tiempo, a cualquier sacrificio. Olvidando que existe el mundo, el que solo será un recuerdo cuando logres tu objetivo, da lo mismo el resto, solo importa tu necesidad interior y si es con las personas que sientes que estarán contigo a pesar de eso, mejor aún; al acompañarse por aquellas que te estimulen, así como tú a ellos, el hacer, podrás encontrar la tan amada, basureada, odiada, pero muchas veces equilibrada, felicidad, aunque simplemente no la haya.
caro lina
06/08/2014 at 13:06
Interesante! esto se puede extrapolar a la realidad del artista chileno en general 🙁