Diversas generaciones de músicos, con influencias distintas que se traducían en una variedad de sonidos, pero todos ellos provenientes del mismo origen, el Metal. Los sonidos agudos y rápidos fueron los protagonistas de la noche del 7 de noviembre en el Club Rock & Guitarras (R&G) y nada mejor que con tres bandas que ya tienen trayectoria dentro del circuito nacional: All Tomorrows, Recrucide y NadSat.
Antes que todo, hay que tener en cuenta que el R&G si bien cumple su función como lugar para música en vivo, siempre ha tenido problemas de audio. No es algo que habitualmente incomode, pero en instancias como esta, donde el espectáculo no tiene bandas tributo sino que son músicos que se han ganado un lugar en la escena nacional con el sudor de su frente; la situación llega a ser molesta. Esperamos que en un futuro cercano este tipo de circunstancias cambien favorablemente.
All Tomorrows
Cuando ya iba a ser medianoche, y luego de varias pruebas de sonido, los primeros en subir al escenario fueron All Tomorrows, dispuestos a deslumbrar al casi centenar de personas que estaban instaladas y preparadas para sentir toda la furia en sus oídos. Todo inició con una melodía pausada; mientras las cuerdas le daban la espalda al público, nada hacía presagiar que el inicio del show sería tan abrupto con los potentes riffs de “Kismet”. No cabe duda que el sonido estaba favoreciendo a la batería, que se destacó con creces en este tema, dando la pauta para que los demás siguieran su ritmo.
El segundo tema, “Apophenia”, evidenció que varios de los que estaban en el lugar tenían ganas de mover sus cabezas. Con un ritmo continuo y una segunda voz que es realmente agradable, la “performance” deja contentos a los presentes y logra aplausos espontáneos al final. El tercer tema corresponde a su reciente single, “Undying Seansons”, donde todos los instrumentos van a mismo compás y nada se escapa porque está todo matemáticamente calculado; el gutural de Pepe Lastarria es algo más vocal y una batería seca va tomando su lugar a medida que avanza la canción. Esto deja claro el crecimiento musical que han tenido, individualmente y como grupo.
Luego es turno de “Sol Agnates”, un tema ya conocido y que la gente disfrutaba en la zona más próxima al escenario. Lamentablemente se extrañó la potencia de la guitarra de Ramón Pasternak, que a ratos quedaba oculta tras el sonido de la batería. Se nota que es una canción que dominan al revés y al derecho porque, a pesar de las falencias técnicas, fue interpretada a la perfección. “3 Second Eben” nos entregó la rapidez y agilidad propia del metal, con Oscar Arenas (bajo) apresurando sus movimientos con mucha destreza y Pablo Martínez (batería) que demostró un total dominio sobre el doble bombo.
El sexto tema corresponde a “Fiver’s Visions”, con su pausado inicio que va tomando forma, hasta aglomerar cada uno de los instrumentos en un mismo ritmo, sonido uniforme y claro, algo muy agradable de oír en vivo. Los contratiempos de la batería son perfectamente continuados por las cuerdas que, luego de un pequeño respiro dentro de la canción, finalmente culmina con la ovación de los presentes. Por su parte, “Opilion”, tema que le da el nombre a su disco, presenta reminiscencias melódicas, paisajes progresivos y una primera voz más aguda que no abusa del gutural (era imposible no recordar a Opeth), la que además cierra con un final abrupto.
Ya nos acercamos a la última etapa de su presentación, con “Immanence” y “Dajial”, ambos con cuerdas coordinadas que suenan al ritmo de la batería y con una incipiente interacción entre los integrantes (cosa que se extrañó durante todo el show). Ese último tema dejó la vara alta para los demás grupos que también tocarían esa noche, lo cual fue agradecido por el público, quien aplaudió con entusiasmo el retiro de la banda.
En resumen, fue un show que estuvo a la altura de la trayectoria que ya tienen en grandes escenarios, con un setlist que reflejó toda la gama de ritmos, riffs y tonos que dominan y que siguen experimentando. All Tomorrows es una banda que se puede jactar del potencial que aún tienen por entregar y es grato ver que en vivo suenan muy parecido al disco (a pesar de las condiciones ya mencionadas).
Recrucide
Pasadas la 1:00 de la mañana, luego de instalar sus instrumentos y respectivos arreglos, hace ingreso al escenario una banda que lleva más de 20 años forjando lo que han conseguido hasta el día de hoy: se trata de Recrucide, quienes traen bajo el brazo un nuevo disco, lanzado este año, Svpremacy (2014), el que también cuenta con dos videoclip oficiales.
Todo comienza con una intro melódica, para luego subir el volumen y tocar lo que será “Death Confession”, un tema bastante potente que muestra la complicidad entre los integrantes del grupo, lo que se tradujo en una unificación en el sonido. “Tyrano” es el segundo corte, donde las guitarras de Hernán Muñoz y Marko Zepeda se tornan más agudas y cada instrumento realiza lo suyo, para que al finalizar la canción, todo se coordine y calce. A estas alturas, con solo dos interpretaciones en el escenario de Ñuñoa, Recrucide se ve tranquilo y dueño del lugar, con gran desplante y sin la extrema necesidad de sobreactuación.
El tercer tema corresponde a “Collapse”, del disco Rebellion (2007), donde la voz gutural debió ser más protagonista, pero por motivos de sonido no pudo ser mejor logrado. Aquí se hizo notar el sonido metálico entregado por el dominio de los tiempos, mostrando silencios entre los ritmos y un final realmente idóneo. El siguiente turno es para “Fresh Flesh”, momento en que la batería se roba el protagonismo (a pesar de estar en las penumbras), y el público no dejaba de observar cada uno de los movimientos de los músicos.
“Ritual” es uno de sus temas más duros y pesados, perteneciente al nuevo disco, y que entrega un sonido unificado y frenético, mientras que Cristian Medina (batería) y Rodrigo Zepeda (bajo) hacen una conjugación rítmica que domina. La sexta canción es para “Satanism”, también del último trabajo, donde todas las cuerdas suenan a la perfección y no hay temor alguno en utilizar contratiempos, pero sin abusar de ello.
Luego de un cambio de guitarra por parte de Hernán Muñoz y un inicio con sonidos ambientales, suena “God Didn’t”, una canción más extensa que lo habitual, lo que permite mayor desplante por parte de los músicos al momento de interpretar. Es momento sacar a relucir el disco Blood Divine (2011), con su canción homónima que goza de guitarras agudas como plato fuerte y una gran performance en el escenario.
“Hipócrita” presenta una gran gracia, una coordinación entre los platillos y las cuerdas, lo que permite introducir cortes de silencio, llenando de euforia al público que, a pesar de estar mayoritariamente sentado, le era imposible no mover la cabeza al clásico estilo metalero. A continuación suenan “Carnage” y “Obliteration” que, si bien pertenecen a distintos discos, poseen un factor en común: la particular forma de variar los ritmos, demostrando el absoluto control que los músicos tienen sobre sus instrumentos.
Para el final dejaron dos grandes temas: primero fue “Uncontrolled”, que destaca por sus sonidos de guitarra más rockera y menos metálica gracias a los riffs más sucios, lo que, luego de regalar un disco al público, da espacio para presentar el último tema, “Art Of Crime”, con una batería rápida que usa y abusa del doble pedal, deslumbrando a la audiencia con un final más extenso que lo que ya habíamos escuchado hasta entonces.
Recrucide es un exponente del metal chileno que no cae en categorías absolutas porque maneja varios sonidos. Lo que sí queda claro es el por qué siguen vigentes, ya que tienen la capacidad de innovar en sus creaciones, poseen desplante escénico a pesar de estar en un espacio reducido, logrando movilidad y dinamismo en la presentación y, por lo mismo, suenan bien y sin equivocaciones, ocupando muy bien el tiempo y la variedad de temas que poseen gracias a sus tres discos de estudio.
Nad Sat
Ya es tarde (02:45 a.m.) y se nota en la reducida cantidad de público que queda en el R&G, pero que siguen esperando a la última banda de la noche. NadSat, provenientes de la quinta región, quienes cultivan sonidos más antiguos del Thrash Metal, con influencias de Slayer y Sepultura, las que quedan en evidencia al tocar el primer tema, “Creator”. Gustan de las guitarras bien eléctricas y metálicas ejecutadas a gran velocidad, y de un gutural más bien bajo y gritado.
Luego vino “Caravana De La Muerte”, con un ritmo marcado por todos los instrumentos que se mantuvieron a raya durante el transcurso de la canción, destacando la guitarra principal que generó sonidos de fantasía, sostenidos en el tiempo. Viajamos al pasado y suena “Frustration”, de 1999, que trae consigo una aglomeración de partes, lo que le otorga protagonismo a la voz de Antonio Ceballos, que nada debería de envidiar a grandes cantantes del Metal.
“Death Sentence” se instala con el pulso fuerte y claro de la batería a cargo de Chris Constans, que fue fielmente acompañada por el vocalista y donde las cuerdas se dedicaron a ocupar cada espacio disponible. Con la siguiente canción, “Kill Me”, Carlos Vergara hace que la guitarra participe como si fuese una voz más dentro de la canción, tomando Fabián Frías (bajo) el mando de los riffs.
El sexto tema es “This Is The News”, recordando al Slayer de los 90’s. Es agradable el acompañamiento que logra la voz en los entretiempos que genera el pedal, a pesar de la dificultad de ser un tema bastante veloz. “Feet The Hate” es una de las canciones más vocales que tienen a su haber, donde aprovechan de interactuar como banda y mostrar el control sobre cada nota que es rápidamente ejecutada.
Traen al presente un videoclip de 1999, se trata de “Your Power is Falling Down”, denotando la juventud y la agilidad en las guitarras, que al final se tornan más melódicas, todo esto para rematar con una destacada entrega del bajo junto a la batería. Es momento de la última canción, “Dream”, que ya deja ver una voz algo cansada, pero con energía, y a su vez las guitarras siguen una métrica constante que a ratos se desmarcan, para darle movilidad a los sonidos.
A pesar de ser una banda de larga trayectoria, Nadsat han tenido algunos percances en su camino, pero no han mermado sus ganas de seguir en carrera y no han podido acabar con el talento que demuestran en el escenario. Ellos son los que cultivan ese metal ágil, agudo y de canciones de poca duración; son los que mantienen viva la tradición sin necesidad de realizar covers, sino, al contrario, entregan obras generadas por su creatividad y experiencia.
La noche del viernes 7 se vistió de negro y despeinó las cabezas de todos lo que estuvieron en el Rock & Guitarras. Creemos que ganas de repetir este tipo de eventos no faltan, pero es necesario una mayor la divulgación de estos. Por el momento, y dada la incipiente reaparición y renovación de bandas de metal chileno, el cuento se ve bien encaminado, pero lo más importante es que en Chile hay agrupaciones que dedican su vida al metal y todas ellas merecen su espacio en la escena. Quedas absolutamente invitado a que revises la CLSK Galería, donde encontrarás registros de lo que te acabamos de relatar.
Setlist All Tomorrows:
01.- Kismet
02.-Apophenia
03.- Undying Seasons
04.- Sol Agnates
05.- 3 Second Eben
06.- Fiver´s
07.- Opilion
08.- Immanence
09.- Dajial
Setlist Recrucide:
01.- Death confession
02.- Tyrano
03.- Collapse
04.- Fresh Flesh
05.- Ritual
06.- Satanism
07.- God didn’t
08.- Blood Divine
09.- Hipócrita
10.- Carnage
11.- Obliteration
12.- Uncontrolled
13.- Art Of Crime
Setlist NadSat:
01.- Creator
02.- Caravana de la Muerte
03.- Frustration
04.- Death Sentence
05.- Kill Me
06.- Feed the Hate
07.- This is the News
08.- Your Power is Falling Down
09.- Dream
Fotografías por Julio Celis