En Septiembre del año 2000, un siempre inquieto Ahmir Khalib Thompson, también conocido como Questlove, se reunió con el pianista Uri Caine y el bajista Christian McBride en un estudio de Philadelphia a grabar un Jam, no parece ser algo fuera del otro mundo, salvo que el resultado es una joya que explora en detalle el legado musical de la ciudad antes mencionada en un trabajo que exuda Jazz y Funk. Así nace The Philadelphia Experiment, con un álbum dueño de una naturalidad que sobrecoge y que revisaremos en esta nueva CLSK Recomendación.
La apertura del disco es con una canción homónima, instrumental como todo el disco, en intrincadas líneas de estilo Drum & Bass en las que Queslove se luce de sobremanera, obviamente debido a su trabajo en Hip-Hop y Neo Soul, lo que le ayuda bastante a que ese estilo tan particular de tocar la batería sea algo tan sencillo de lograr.
Cortes como “Grover” y “Lesson #4” hacen imposible escuchar el disco en estado de letargo, el Groove te obliga a ir con él, necesitas moverte y dejarte llevar ya sea moviendo el cuello, el pie o simplemente a cuerpo completo si el ánimo y la ocasión acompaña. El rey indiscutido aquí es el bajo, compacto, sobrio y poderoso pero deja una sensación de que las notas que fueron tocadas eran las justas y necesarias: no sobra ni falta nada.
“The Miles Hit” por su parte ofrece una apuesta más dinámica en sus patrones intrincados, un teclado que raya en lo psicodélico y un bajo mucho más estridente, un tono quizás más serio en un trabajo donde destaca la naturalidad con la que se ejecuta la música.
The Philadelphia Experiment, música antigua con sabor a nuevo
A los tres músicos anteriormente mencionados le sumamos la colaboración (en algunos cortes) de Pat Martino en guitarra, John Swana en trompeta y también Larry Gold en Celo en la última canción, sin dudas un lineup de lujo que termina por sellar un disco tremendo.
Lo que es impresionante también es que no tenga el reconocimiento que merece, ya que rara vez es considerado en los charts especializados, pasando casi desapercibido de la escena del Jazz en Estados Unidos, quizás porque no es una banda fija -aunque posteriormente hubieron otros dos proyectos de las mismas características pero con otro nombre y otras personas pero manteniendo evolucionando el concepto y convirtiendo la idea en un colectivo- ,y sin embargo el nivel musical que demuestra es de probablemente uno de los mejores discos de la década del 00′ , un manual de como hacer Jazz y funk respetando las raíces pero con una increíble dirección moderna.
Por todo lo que dijimos antes, nos fue dificil encontrar un link para compartir en su versión original, pero si encontramos esta publicación en Youtube, con las canciones en distinto orden. No es un disco conceptual, así podrás disfrutar igual de The Philadelphia Experiment.
https://www.youtube.com/watch?v=JqxMDLC6W_8