Con el año 2022 en la última milla antes de su cierre, no lo queremos terminar sin retomar nuestra sección CLSK Bandas y recomendarles una agrupación que tiene mucha proyección y, al mismo tiempo, presentan una propuesta bastante particular. Las regiones tienen mucho que ofrecer y es así como desde la quinta región les presentamos al grupo Espresso:
1. Nombre de la banda: Espresso
2. Lugar y país de residencia: Quillota, Chile
3. Integrantes: Pierino Madrid Pruzzo (bajo) Fernando Meneses Díaz (guitarra) Elías Orellana Gómez (batería) Wilfredo Salas González (teclados, sintetizadores)
4. Estilo: Jazz Fusión, Progresivo.
5. Influencias: Congreso, Tryo, Fulano, Los Jaivas, King Crimson, Chroma Key, Rush, Steven Wilson, The Aristocrats, The Mahavishnu Orchrestra, Tears for Fears, Nine Inch Nails.
6. Estos son los canales oficiales de la banda:
7. En sus propias palabras, esta es la propuesta de ‘Espresso’:
Su estilo está inspirado en la fusión de elementos del rock, el jazz, la electrónica y la experimentación lo que se ve complementado con variadas escenas sonoras que se cohesionan en múltiples matices instrumentales.
Luego de su EP titulado ‘Pleno’, la agrupación Espresso se volcó a trabajar en el estudio para presentar su más reciente publicación homónima, cuya propuesta no va a dejar indiferente a todos aquellos vinculados al mundo del jazz fusión y el progresivo.
El disco nos presenta composiciones donde abundan las progresiones rítmicas acompañadas por fluctuaciones de pasajes instrumentales que dejan el espacio suficiente para la creación de atmosferas sonoras donde entran en juego el uso de recursos electrónicos.
Además de las variaciones musicales donde pasamos por parajes contemplativos, existen otros de carácter enérgico y algunos más sofisticados; estas variaciones son patente evidencia de como se conjugan las influencias de jazz con pinceladas funk, su evidente estructura progresiva, la propia identidad de la banda, consiguiendo así piezas creativas, disfrutables y dinámicas que sin duda vale la pena escuchar, para luego dejarse llevar por la experiencia del disfrute sonoro.