Escucha “A Dramatic Turn Of Events”, lo nuevo de Dream Theater

METALERO ? jajajajajaja pobre weon escucha adrenaline mob para eso perro, dream siempre ha sido mas rock progresivo que metal. Ademas no se si muchos concuerdan conmigo pero bridges in the sky es la raja, una wea pesada que no aburre como algunos de los temas pesadita ERA portnoy, breaking all illusions temon y lost not forgotten una wea loca que no tiene mucho sentido al principio pero igual esta la rajaa.
9 al disco

cabros, me da paja opinar de nuevo, asi que les dejo un review que hice en otro foro, por si alguien se motiva a leer y comentar algo.

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Luego del gran revés que significó la salida de Mike Portnoy de DT, los cabriolos de Berkley nos tiran a la parrilla un nuevo discazo, y ¡vaya que discazo, casi 80 minutos de música!

En esta ocasión, los tarros estuvieron a cargo del chiquitín Mike Mangini, quién no participó en el proceso de composición, sino que sólo se limito a escribir las drumtracks. Como segunda novedad, cabe destacar el regreso del chino Myung a la composición de letras (y quizá de música también, don Portnoy tenía a varios medios cortos en esos temas anteriormente).

Hablando en términos muy generales, podemos notar cambios significativos, comparativamente a lo que se venía haciendo en la banda. Se aprecian claras influencias personales de los miembros, dando énfasis en la entregada por LaBrie (considerando su proyecto solista). Se puede notar la inclusión de diversos elementos electrónicos y de mezcla que a ratos le dan un nuevo aire a las canciones, y los ambientan en algún progresivo que desde hace tiempo no se le escuchaba a los cumpas. Como resultado obvio a la salida de MP, existe un claro protagonismo de las cuerdas y las teclas en este disco (Rudess y Petrucci hicieron lo que quisieron durante el disco), en donde, a juicio muy personal, don Mangini fue la nota baja del asunto. Teniendo la facilidad de que la música estuviera “llegar y ponerle”, le faltó mucho tino en cuanto a patrones y fills adecuados, salvo algunos pasajes. Nunca pensé en que diría esto, pero creo que Portnoy estaba calcado para este disco.

Como última apreciación general, es menester mencionar el GRAN trabajo de Myung, ahora en la música, pues despues de muchos discos (por lo menos del Six Degrees creo yo), el asiático nos sorprende con pistas de bajo realmente virtuosas, elegantes… ¡Y QUE SE ESCUCHAN!

Ahora sin más, pasemos a las apreciaciones individuales:

1.- On The Backs Of Angels
El primer single del disco. Por su salida anticipada, fue aquél con el que se tuvo más tiempo para análisis.

En primera instancia, podemos encontrar ciertas influencias de discos de antaño de la agrupación (Awake suena en varias esquinas, y Pull Me Under pulula en uno que otro bridge, sobre todo al ending). El pelao Rudess nuevamente experimentan con sus aparatos Daft Punk para ambientar el asunto, en donde se observa que la intención fue calzar riffs más contemporáneos en compases complejos. No es un tema realmente llamativo, sino más bien regular, casi como un relleno para introducir los platos fuertes que vendrán presentandose a través del disco. Mangini cumple.

2.- Build Me Up, Break Me Down

El punto bajo del disco a mi parecer. Algo les dió a estos weones con tirar siempre un tema flojo en el segundo lugar, por lo menos desde hace un rato, y ejemplos nos sobran con sólo mencionar A Rite Of Passage y Forsaken.

Acá nos encontramos con una clara influencia de electro-elementos provenientes de la cabeza de LaBrie: su disco Elements of Persuation se me paseó por toda la canción. Riff ni tan pegajoso, letras bastante vanas, y pocos elementos rescatables. Ya recien acá, podemos empezar a notar algunas deficiencias creativas del bataca Mangini; exceso de patrones a doble pedal, y algunos fills poco certeros.

3.- Lost Not Forgotten

El primer plato fuerte del disco… y no destiñe. Un gran despliegue de talento individual de estos músicos en la que es una de las largas composiciónes del cedé, que bien me tomó al menos unas 15 escuchadas para empezar a agarrarle el gusto.

El tema comienza con una grata y suave introducción a cargo del pelado, preámbulo del riff principal que se nos presenta después con la entrada de todos los instrumentos. Destacan los imposibles unísonos de teclado y guitarra que aparecen previo a las letras (que en algún momento me recordó a ese ya viejo Train Of Thought, con el final de This Dying Soul).

Se desarrolla el tema entre letras medievales y melodías pegajosas, todo ello sobre, nuevamente, compases complejísimos.

En general, buen acople de instrumentos, gran despliegue de Petrucci y el pelado en los solos, Mangini y Myung aportando con lo preciso. A ratos recuerda mucho a aquél antiquísimo Under A Glass Moon, con breaks enredados y juegos sobre los fills.

4.- This Is Life

La primera pausa del disco. This Is Life resulta ser un tema bastante cómodo, con una guitarra líder bastante pegajosa y con armonías que se logran de buena manera. En algunos ratos se perciben ciertos elementos Octavariumenses, en donde los vínculos de cada instrumento se sienten potentes, sin que ninguno destaque en exceso sobre el otro (exceptuando la pega del guitarra, claro, quién es el que arma el hilo de la canción prácticamente).

Luego de ciertas oídas, se concluye que es un tema de una línea más adherida a las composiciones recientes, con varias pinceladas de 6DOIT además de las mencionada. En sumatoria, es una buena canción con aire a balada Petrucciera.

5.- Bridges In The Sky

El trance del chamán es el quinto tema de este disco, y viene cargado con el material más pesado del mismo.

Acá podemos escuchar una gran melodización de las letras, que acompañan de forma notable la música: gran trabajo de LaBrie y la banda por esa parte. Sin embargo, en términos netamente musicales, la canción no destaca en demasía. Si bien los riffs son bastante sucios y entretenidos, a ratos pueden resultar planos y repetitivos, apenas oxigenados por la pausa instrumental ya bien avanzada la canción.

Quizá, la mayor decepción de esta canción fue el preámbulo: el intro invita a pensar en la existencia de elementos folclóricos, casi amazónicos dentro de la misma, expectativas que apenas son retribuidas con aquellos acordes con onda egipcia en el break de instrumentos.

A juicio personal, es en este tema donde Mangini fue más preciso con su composiciones de bataca; sin embargo, se hacen notar las saturaciones de doble pedal y el sobreuso de algunos fills.

En fin de cuentas, Bridges In The Sky resulta ser un tema llamativo, ofrece interesantes elementos metaleros que a ratos entretienen, pero… siguen dejando un vacío.

6.- Outcry

Gran, pero gran canción. Si bien no es la mejor del disco, es una de las que más me han convencido hasta ahora, junto con Lost Not Forgotten.

Acá las pegas generales se reparten equitativamente, entregando riffs atractivos y ambientes muy bien logrados. Cabe mencionar que tiene más de algún rasgo de similitud con Bridges In The Sky, lo que en un principio genera que no se le preste mucha atención a esta canción. No obstante, acá tales elementos se logran de mejor manera, potenciados por aquellas suaves pausas de precoro, y pegajosas melodías de canto. El apartado instrumental de esta pieza es sobresaliente, pues si bien entrega un ente que suena en varias otras partes del disco, el sonido conseguido acá es bastante armónico y versátil dentro de una canción que no aburre en ningún momento.

Los quiebres y fills se escuchan muy marcados y no dan espacio a respiros, para finalmente despedir entre acordes casi oscuros y épicos. Gran mención para el trabajo de Myung acá, aportando con líneas de bajo pertinentes, y más de algún sobresalto que nos hace decir “chucha, ¡estaba vivo este weon!”

7.- Far From Heaven

La segunda GRAN pausa del disco, que para mí, es más un preámbulo de Breaking All Illusions.

El que no haya pensando en Vacant cuando escuchó esta canción… es porque, claramente, no la ha escuchado jaja. Hermosa y solemne melodía se logra acá entre el piano y las cuerdas de sinfonía; LaBrie, bastante oportuno en la voz, dándole vida a una de las letras más convincentes del disco.

8.- Breaking All Illusions

La guinda del disco, sin duda. Temazo de pies a cabeza.

Al escuchar esta composición, terminamos de convencernos de que estos neoyorquinos le dieron más de alguna escuchada al Images & Words para este álbum. Y es que no podemos evitar notar los múltiples pasajes que nos traen ese majestuoso “Learning To Live” a la vida nuevamente. La complicidad entre Petrucci y Rudess logra un punto excelso en esta pieza, en donde toda la banda se pasea dentro de pasajes y quiebres de gran armonía, y al mismo tiempo, de complejidad. Las voces se encuentran delicadamente insertadas dentro de la canción, con gran mérito para el guataca en las melodías, dandole vida a un coro simplemente para recordar, con letras directamente desde la mano del chino Myung, quien despues de años de espera, nuevamente se auspició con un par de versos (era de esperarse, vez que escribe este weón, sale una temazo).

A pesar de que el balance musical general es sublime, se aprecia levemente que, otra vez, Mangini es quien da la nota baja: se le nota muy flojo en patrones simplones y ciertos fills que resultan poco armoniosos con lo que sucede dentro de la canción. De cualquier modo, el esqueleto de la misma está muy bien logrado, lo que hace que aquellas deficiencias sean partes de un segundo plano.

Finalizando, y resumiendo en la frase inicial: Breaking All Illusions fue todo lo contrario a su nombre. Me hizo construir algunas nuevas ilusiones en la música de Dream Theater, ilusiones que yacían rotas a causa de entregas anteriores.

9.- Beneath The Surface

A diferencia de discos anteriores, Dream se aleja un poco de los finales épicos, y decide cerrar su placa con una balada de antaño.

Beneath The Surface nos otorga compases casi sacados de otros discos; es de esas baladas que extrañábamos en la banda. Con una pacífica y carismática voz de LaBrie bailando encima de una bella composición, que emociona como alguna vez lo hicieron aquellas ya lejanas composiciones como Through Her Eyes, pero sin dejar de lado algunos ingredientes más nuevos, que nos dan a pensar por sobre todas las canciones, en aquella reciente Wither.

Es un buen cierre para un disco que, en la suma final, presenta más altos que bajos.

Desde una visión de cierre y muy personal, creo que es, en cierto sentido, un regreso de Dream Theater. El primer disco realmente interesante ya desde el 6DoIT. Un reencuentro con el progresivo de antaño, de la mano del mayor protagonismo de JMyung, y la mayor participación de aquellos que no podían hacerlo mucho anteriormente (cofcof Labrie cofcof).

De que hubo pasajes negativos, los hubo, pero si hay uno que en la sacada de cuenta general debe ser mencionado, es derechamente don Mangini. Creo sinceramente que le quedó grande la pega. Si bien MPortnoy venía componiendo ya por inercia y pistas bastante dejadas de interés, el nuevo Mike no nos trajo mayores novedades, siguiendo apenas, la misma línea del que se fue, entregando muy poco tinte propio, además de denotar falta de creatividad en más de algún momento del disco, sobre todo en patrones demasiado simples y fills muy poco inteligentes musicalmente, sin mencionar lo rudimentario de su estilo, el jugar a pegarle a todo nomás (creo que lo escuché abrir el hihat 1 o 2 veces en todo el disco).

De cualquier forma, habrá que esperar la siguiente entrega de estos cumpipas; no podemos crucificar al socio por una sola pega… y no creo que haya que esperar mucho, pues como va la tendencia, ¡puede que saquen un disco en 6 meses más!