A lo largo de la historia pocas bandas han logrado plasmar las más innovadoras técnicas de grabación, complementarla con ideas revolucionarias para la época, representar de fiel manera los conceptos más elementales del Rock y finalmente, lograr el arraigo popular. Sí, hablamos de los preceptos más básicos que significa The Beatles en la cultura contemporánea, y de cómo un álbum rompió todo tipo de estructura impuesta.
El año 1967 está marcado en la historia de The Beatles por el pleno auge de la leyenda urbana de un Paul McCartney muerto y reemplazado por un doble el cual tomó el lugar del supuesto fallecido. Por otro lado, el impacto que causó el lanzamiento del icónico ‘Pet Sounds’ (1966) de The Beach Boys en Paul fue el principal leitmotif de la producción de uno de los álbumes más brillantes de la historia del Rock y el Pop: ‘Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band’.
El hastío de la banda de las presentaciones en vivo, la obsesión por la experimentación con sonidos y la reducción de su carrera a álbumes de estudio, produjo el concepto de la creación de una banda ficticia y su actuación en vivo, que muy probablemente fue el precursor del espectáculo de The Rolling Stones, llamado ‘Rock and Roll Circus’ (1968).
La producción comienza con la introducción a este alter ego: “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”, un tema perfecto para iniciar una producción y así también lo indican sus letras. Una composición energética, que marca distancia con el psicodélico cierre de su anterior álbum ‘Revolver’ (1966). Las adiciones sinfónicas de cornos dejan entrever las cercanías con el Pop Barroco y los sonidos ingeniados por Brian Wilson.
“With a Little Help From my Friends” es una buena y simple composición, sobretodo destacando la transición con la entrega anterior. Sí, todos sabemos que Ringo no es precisamente un gran cantante, pero si realiza un trabajo aceptable destacando la última sección. Una canción hecha al molde del baterista, sin mucha complejidad pero sí trabajada para ser un hit radial. Cabe destacar que si bien nos encanta este single, siempre preferiremos la versión de Joe Cocker.
El álbum continúa con la volada psicodélica “Lucy in the Sky with Diamonds”, que dada la época en la cual fue lanzada generó gran polémica por sus supuestas referencias a alucinaciones producidas por drogas populares de aquel tiempo. Fuera de la temática lírica, es uno de los temas más reconocidos de los fab four, y con razón, musicalmente es un deleite en donde los órganos Lowrey y Hammond son los protagonistas de un viaje sideral a través de la imaginación de Lennon y la inspiración en el dibujo de su hijo Julian.
“Getting Better” es una de aquellas canciones que pueden subirte el ánimo de golpe, la interacción entre McCartney y Lennon en las voces permiten una especie de diálogo entre un mismo protagonista. El sencillo ritmo es un contraste con Diamonds pero si se complementa con el estilo más simplista de Friends, resulta ser un corte que no queda fuera de lugar en ningún momento. Por su lado “Fixing a Hole”, mucho más cerca de la psicodelia, un escape de McCartney a las cosas que le molestan y cómo puede evadirlas mediante el uso de drogas recreativas.
“She’s Leaving Home” es probablemente uno de los puntos más altos del álbum. Más enfocada en la melodía, principalmente por la composición de carácter sinfónico, está centrada en la historia de una joven que toma las riendas de su vida de forma sorpresiva. Este tema cuenta sólo con la participación de Lennon y McCartney, dando rienda suelta a un relato musicalizado de una forma que marca otra arista en los sonidos que podemos encontrar en esta placa. “Being for the Benefit of Mr. Kite!”, inspirada por un viejo poster de una presentación circense, es una de aquellas piezas que sólo pocos elegidos pueden generar: el de crear una historia y una composición que le haga justicia a un objeto tan simple, como por ejemplo, un folleto promocional. Por su puesto, este tema es una descripción musical de una expresión visual, simplemente genial.
Si “She´s Living Home” fue una creación de forma aislada de la dupla McCartney/Lennon, “Within You Without You” fue la respuesta a cargo de George Harrison, inspirado por música clásica india presentada por su mentor, el Maestro Ravi Shankar. Esta fue la segunda creación de este estilo de Harrison y que sirvió de trampolín al mundo occidental de esta tendencia que después abrazaría una gran cantidad de bandas a finales de los años 60 y principios de los 70.
“When I’m Sixty-Four” es un tema que puede ser acompañado por una película en blanco y negro de Charles Chaplin, en que el aspecto teatral de esta antigua composición de McCartney evoca una clara declaración de intenciones entre una pareja. Por su parte, “Lovely Rita” es una entrega en la cual el Bajo adquiere una gran importancia al otorgarle el carácter de principio a fin. La psicodelia propia de la era vuelve a hacerse presente con las armonías vocales, sobretodo en el cierre del tema con juegos de voces dignos de un trance de LSD.
“Good Morning, Good Morning” y “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band (Reprise)” son dos temas que van de la mano para dar un cierre a este espectáculo del alter ego del cual hablamos al principio: son canciones festivas que logran una conclusión redonda a este recorrido de diferentes estilos y tendencias musicales.
Punto aparte para quizás una de las mejores entregas que el cuarteto de Liverpool pudo entregarnos en su carrera: “A Day in the Life” es un cierre inesperado al momento de escuchar por primera vez este álbum, a destiempo del resto de la producción. Ahora, lo que alcanza independientemente, es una combinación de nostalgia y elementos sinfónicos combinados con otros psicodélicos en in-crescendo, pasajes emotivos en las letras principalmente atribuidas a Lennon y para terminar una sección críptica, muy habitual en las composiciones y en el arte de los álbumes de los Fab Four.
Hablar de este álbum que está próximo a cumplir 51 años de existencia, es referirse a un disco bisagra dentro de la historia de la música. Sienta y confirma los cimientos a una era de experimentación con sonidos, de no seguir cerrado en la misma fórmula una y otra vez. Para los Beatles hubiese sido muy fácil grabar diez ‘A Hard Day’s Night’, pero la real trascendencia de este cuarteto fue el de abrirse hacia nuevas exigencias, y aun así, seguir siendo populares. ‘Sgt. Pepper’s’ y The Beatles, desde un mundo Pop, fueron los principales responsables del surgimiento de nuevas tendencias en ese entonces, que verían frutos en la próxima década y que a la larga significaría el inicio del fin de una de las más grandes agrupaciones de la música moderna.
Ediciones anteriores:
CLSK Retrovisor I: Booker T. & The M.G.s – Green Onions (1962)
CLSK Retrovisor II: Charles Mingus – The Black Saint and The Sinner Lady (1963)
CLSK Retrovisor III: Stan Getz, João Gilberto – Getz/Gilberto (1964)