¡Hey Steven Wilson! No necesitamos que regrese Porcupine Tree [CLSK Opinión]

Si, de esto se trata esta nota. Pero no es llegar y decirlo, por lo que trataremos de desarrollar el tema con altura de miras, aunque varios de ustedes estarán comentando tras sólo leer el título en redes sociales. Con el anuncio y excelente recepción de su próxima visita a Chile el 18 de marzo de 2016 en el Teatro Caupolicán, vale la pena discutir un poco.

Porcupine Tree desapareció formalmente despues de The Incident (2010), el indiscutible disco “menos bueno” del grupo. Tiene sus momentos, nos gusta, pero no creo que se lleve el mayor porcentaje de escuchadas en este instante. Al contrario, siempre recordamos Deadwing, In Absentia, Fear of a Blank Planet, un punto cúlmine en la historia de la banda, algo que para muchos ya fue alcanzado con Lightbulb Sun o Stupid Dream. Ni hablar de la discografía previa que sin discusión se han vuelto joyas de colección del rock progresivo más contemporáneo.

El tema es que Porcupine Tree venía de capa caída; Octane Twisted, el último registro en vivo lanzado el 2012, fue una buena muestra de esto al verse la agrupación con poca alma, quizás porque Steven Wilson ya estaba centrando su creatividad en sus proyectos en solitario o cuantas otras razones.

https://www.youtube.com/watch?v=3oAcw7lozFA

Como muchas bandas deberían hacerlo (al que le quede el poncho que se lo ponga), Porcupine Tree entró en un receso indefinido, no se han separado oficialmente, quedando el regreso para un “pronto” y Steven Wilson se concentró en su carrera solista.

Insurgentes (2008) fue un disco especial, muy oscuro, denso y muchos de los elementos y estética de Porcupine Tree se hacían presentes, lo que quizás aventuraba que las capacidades de Steven Wilson en solitario no eran tan abismantes, pero al cual el tiempo le daría la razón.

Por otro lado Grace For Drowning (2011) comenzó a mostrar el lado más sensible, pero sin soltar completamente la penumbra que había cubierto su trabajo anterior, y así consiguió mejores “primeras impresiones”; llegó finalmente a Chile en 2012 , dejando claro que en vivo su propuesta era sobresaliente, y así Porcupine Tree empezó a pasar al olvido. No quiere decir que dejamos de escuchar los álbumes de esa banda, simplemente algo estaba pasando en las entregas propias de Wilson que nos hizo enfocarnos y estar pendientes de sus nuevas creaciones.

The Raven That Refused to Sing (And Other Stories) (2013) le tapó la boca a varios, hizo llorar a otros con “Drive Home” y “The Raven…” y comprobó que su música podía evolucionar aun cuando las influencias se remontaban al rock progresivo de antaño y si, superó las expectativas y vino a Chile nuevamente.

Y llegamos al año 2015, cuando Hand.Cannot.Erase llegó a nuestros oídos y la sorpresa fue tal que con 3 conciertos en Chile, siempre se presentó a teatro lleno, y todos coreaban las canciones estrenadas hace un par de meses. Esta placa es sin duda una consolidación de todo lo que Steven Wilson ha venido haciendo por años, con elementos identificables y relacionables con sus previos trabajos en solitario. Todo está ahí, es la suma de las partes, un logro que solo algunos podrían conseguir. Son pocos quienes escucharon este disco y lo sacaron de su “playlist” rápidamente. Los elogios, más allá de que le den lo mismo a Wilson, son transversales y este artista está en un punto que quizás no sabíamos que alcanzaría tan rápido.

Entonces, volviendo a la frase que inició toda esta discusión, vale preguntar ¿para qué queremos que vuelva Porcupine Tree si lo que Steven Wilson está creando en la actualidad objetivamente va por sobre de lo que venía haciendo la banda en el año 2010? Estamos seguros que Wilson sacará sus mejores ideas para un nuevo lanzamiento de PT o se las guardará para seguir alimentando su discografía solista?

En ese aspecto, sería más interesante que Wilson siga aliándose con otros para generar algo completamente novedoso, ya que retomar Porcupine Tree donde quedó, teniendo en cuenta toda el agua, o mejor dicho música, que ha pasado bajo el puente, tiene un panorama que a priori se ve complejo y, quizás, poco atractivo.

Por todo lo anterior, podemos decirle a Steven Wilson que no necesitamos que Porcupine Tree vuelva a la vida, no por ahora por lo menos.

Ahora tú, deja tu comentario al respecto, por lo mismo, dejamos la siguiente encuesta.

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